Existen una gran variedad de complementos alimenticios que ayudan en la mejora de las capacidades intelectuales.
Las vitaminas para estudiar son las siguientes:
Vitamina C: es una vitamina que nuestro organismo no puede fabricar, y es la vitamina por excelencia de los complementos vitamínicos. Es un gran antioxidante por lo que reduce el antienvejecimiento y deterioro de nuestro cuerpo. Un nivel bajo de vitamina C puede producir escorbuto. Se encuentra de forma natural en frutas y verduras, especialmente en los cítricos como la naranja y el limón.
Vitamina B: es un complejo de vitaminas (b1, b2, b6, b9, b12) hidrosolubles, por lo que se eliminan en la orina fácilmente. Esto hace necesario tener que ingerirlas diariamente en una cantidad mínima. Estas vitaminas contribuyen en el metabolismo, y su falta puede causar diversas enfermedades, como la anemia causada por falta de vitamina B12.
Vitamina A: es la encargada de la producción de los anticuerpos, el crecimiento de los huesos y la visión. Una falta de esta vitamina puede provocar problemas de visión y menor resistencia ante las infecciones.
Vitamina E: es una vitamina antioxidante, su falta puede afectar al sistema nervioso.
Vitamina D: interviene en la absorción de minerales y la mineralización de los huesos. Es muy recomendable que la tomen personas mayores con problemas de mineralización ósea, ya que, complementando con calcio, fortalece los huesos. Su falta puede producir raquitismo.
Vitamina K: interviene en la coagulación de la sangre, por lo que una falta de esta vitamina produciría un aumento de los sangrados y hemorragias.
Minerales: hay una gran cantidad de minerales, una gran cantidad de complementos vitamínicos o alimenticios llevan magnesio y potasio. El magnesio es un elemento clave para el funcionamiento de músculos y nervios. El potasio se encarga del equilibrio del agua y de gran cantidad de reacciones celulares.